La marihuana es una planta ilegal en México y otros países del mundo. Es considerada una droga psicoactiva, ya que al introducirse por cualquier vía ejerce un efecto directo sobre el sistema nervioso central. Esto se debe a los efectos psicológicos que produce el THC (Tetrahidrocannabinol) en los consumidores de dicha planta. “Por una lado tenemos una sustancia que se ha consumido durante siglos, pero cuyos efectos se han probado en muy pocos estudios clínicos con pacientes”, explica Manuel Guzmán, que dirige un grupo de investigación sobre cannabinoides en la Universidad Complutense de Madrid. Los estudios de Guzmán revelan que el THC reduce el crecimiento de tumores agresivos y los ataques epilépticos en niños con síndrome de Dravet. También ayuda para combatir los espasmos de la esclerosis múltiple y el dolor y las náuseas en pacientes que padecen cáncer.
Actualmente existe una gran polémica sobre si esta planta debería ser despenalizada en México. El pasado 4 de Noviembre del 2015 la Suprema Corte de Justicia de la Nación abrió la puerta a la liberación de la siembra y uso recreativo del cannabis, al otorgar un permiso para cuatro personas que interpusieron un recurso legal contra la prohibición.
La encuesta realizada por el periódico El Universal mostró que de 1,000 ciudadanos consultados el 32% está de acuerdo con la despenalización de la marihuana contra el 66% que se mostró en desacuerdo, mientras que el 2% restante prefirió no responder a la pregunta.
Existen sociedades de primer mundo en donde la marihuana es legal. Un ejemplo de ello son los Países Bajos, en donde en 1976 se implementó la Nueva Ley del Opio, que distinguía entre drogas blandas y duras. Una de las principales razones de ésta aprobación fue el duro problema con la heroína que la comunidad holandesa enfrentaba sobre todo en Ámsterdam, su capital. En 1972 el informe ‘’Touwtrekken om hennep’’ concluyó que el consumo responsable del cannabis era factible y comparable con el consumo de alcohol y tabaco. El objetivo era la despenalización completa, pero se convirtió en un proceso largo debido a los convenios internacionales. Con el tiempo se despenalizó el consumo de cannabis, convirtiendo a los Países Bajos en el primer país en el mundo en hacerlo.
Yo opino que nuestro país no está preparado para dar un paso de esta magnitud. México tiene muchísimos pendientes que no pueden quedar sin concluir antes de la legalización de la marihuana, lo cual es un proceso que se debe llevar a cabo con cuidado. Creo que nuestro contexto es muy diferente al de los países europeos en donde la cannabis fue despenalizada, ya que para empezar el nivel educativo es mucho más alto que en nuestro país. No es lo mismo darle un gallo de mota a un abogado o a un doctor que dárselo a un estudiante de preparatoria o a un albañil. Para lograr una sociedad consciente es necesario romper los estereotipos sociales que se arrastran desde hace cientos de años. En México existen factores que impiden que la gente construya una nueva visión sobre la marihuana, como lo son el fanatismo religioso y la falta de educación.
Para mí, la despenalización del cannabis es una consecuencia evolutiva de la sociedad mexicana y para lograrlo es necesario impulsar los principales proyectos que harán de nuestro país un lugar en donde la gente es libre y consciente para elegir con responsabilidad. El primer paso sería eliminar de las escuelas la idea de imponer el miedo a los estudiantes para que eviten usar cualquier tipo de drogas, me parece mejor opción que se les informe sobre los pros y contras de cada sustancia para que cada persona esté preparada para elegir.
En conclusión, yo estoy a favor de la despenalización de la marihuana, aunque esto conlleva una serie de reformas y campañas para que la sociedad esté preparada para un avance de este tamaño. Creo que para llegar a ese momento van a tener que pasar unos cuantos años más, en un México donde no exista la impunidad ni la corrupción, donde los diputados y senadores trabajen para el pueblo y no para sus bolsillos, donde exista un Presidente que tenga una visión revolucionaria y equitativa y no se convierta en un títere de las élites, donde las personas no desaparecen por arte de magia y ni siquiera la ciencia moderna encuentra una explicación coherente ante dichos sucesos, donde los ecocidios provocados por los grandes empresarios son penados y no encubiertos y sobre todo, donde la información está al alcance de todas las personas y la marginación no sea un obstáculo para su difusión.
FUENTES CONSULTADAS:
http://eleconomista.com.mx/sociedad/2015/11/10/dos-tercios-mexicanos-desaprueba-legalizacion-mariguana
http://www.bbc.com/mundo/noticias/2015/11/151104_mexico_marihuana_legalizacion_ludico_an
http://www.forbes.com.mx/la-marihuana-legal-en-eu-y-la-violencia-en-mexico/
http://www.inegi.org.mx/prod_serv/contenidos/espanol/bvinegi/productos/integracion/sociodemografico/religion/div_rel.pdf
